A lo largo de la historia, muchas han sido las corrientes de pensamiento que han concebido al ser humano como un ser con cualidades inherentes únicas, con creatividad y capacidad de autorrealización. La Psicología Humanista abarca un nutrido número de estas corrientes, entre las que se encuentra la Terapia Gestalt y la Arteterapia. Ambas aportan instrumentos para el desarrollo humano, alejándose de la idea de concebirnos sólo como seres racionales o mecánicos: atendiendo otros aspectos del ser, que no son contemplados en otros ámbitos o instituciones sociales.
La Terapia Gestalt actúa desde el vínculo con el otro, y está fundamentada en 3 pilares: el aquí y ahora, el darse cuenta, y la responsabilidad, y aporta una mirada interna que amplía nuestras capacidades creativas. El Arte, como lenguaje no verbal favorece la expresión de nuestro mundo interno, haciendo visible lo invisible.
Desde 2018 acompaño a personas en sus procesos de desarrollo personal, les facilito un espacio de exploración, reflexión y creación de su realidad, utilizando las diferentes disciplinas en las que me he formado, aunando Arte, Terapia Gestalt y Arteterapia humanista.